
DE UN MUNDO RARO
Estamos a cinco meses del arranque formal del proceso electoral 2021 en México; elección que marcará también la primera mitad del mandato del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Dicho proceso comicial será, sin duda histórico, no solo por la renovación de las 500 diputaciones federales, 15 gubernaturas y más de 3 mil cargos de elección popular del orden local que estarán en disputa, sino porque tanto las campañas políticas como los trabajos de preparación del proceso habrán de desarrollarse en el marco de la llamada “nueva normalidad”, a la que busca llegar el gobierno federal tras la fase más crítica de la pandemia por el COVID-19.
Y es que de manera independiente a las estrategias y protocolos previstos por el gobierno federal para enfrentar las siguientes fases de la pandemia, existen plazos y términos específicos a cumplirse dentro del calendario electoral para establecer las condiciones bajo las cuales los mexicanos habrán de concurrir a las urnas prácticamente dentro de un año, el 6 de junio de 2021.
Tan sólo en el mes de junio que está por iniciar, el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) deberá resolver en definitiva sobre la procedencia de solicitudes realizadas por las organizaciones que desean el registro como partidos políticos. De manera posterior a las pasadas elecciones federales, un total de 58 organizaciones presentaron solicitud, de las cuales, a enero del presente año 31 ya habían desistido o abandonado el proceso.
En total son seis nuevas organizaciones políticas las que se perfilan para obtener su registro como partido: Redes Sociales Progresistas, Encuentro Solidario (antes Partido Encuentro Social ), Grupo Social Promotor por México (antes Nueva Alianza), México Libre, Fuerza Social por México y Fundación Alternativa.
Es decir, contando a los institutos ya registrados, en 2021 se tendría por primera vez un proceso electoral con la participación de 13 partidos políticos; el mayor número en la historia.
Por otra parte, en octubre próximo se dará la apertura oficial de los trabajos preparatorios del proceso electoral 2021 por parte del Consejo General del INE, con lo cual, los partidos políticos podrán iniciar también los procesos internos para seleccionar a sus candidatos a los cargos de elección popular en disputa.
Cabe mencionar que precisamente, ante las condiciones atípicas generadas por la pandemia del COVID-19, el INE decidió adelantar desde el pasado 20 de mayo los trabajos del Comité Técnico Asesor para el Programa de Resultados Electorales Preliminares (COTAPREP), responsable de diseñar el sistema y la estrategia de difusión de los datos que arrojen las urnas.
El secretario ejecutivo del INE, Edmundo. Jacobo Medina explicó que uno de los retos fundamentales del COTAPREP será el desarrollar mecanismos más precisos y eficientes para la recabación y publicación de los resultados electorales, para lo cual se designó a un panel de seis expertos en informática, servicios digitales, ciencia política y estadística. Estos trabajos originalmente iniciarían en enero del próximo año, pero se tomó la decisión de adelantarlos para permitir la realización de trabajos y pruebas de manera remota. De hecho, la sesión del Consejo General del INE para aprobar dichos trabajos fue realizada de manera no presencial, utilizando una plataforma digital para videoconferencia en grupo.
Aún cuando las expectativas del gobierno federal apuntan a que pudiera suscitarse un retorno escalonado a las actividades productivas y sociales en los próximos meses, la incertidumbre sobre una posible cura o tratamiento para el coronavirus anticipa que podría haber cambios importantes en distintos aspectos del proceso electoral y por consiguiente, de las campañas políticas.
Habrá que recordar que en pasados días, el propio subsecretario de Salud Hugo López-Gatell reconoció que aún con el eventual desarrollo de una vacuna, es probable que muchos de los aspectos de nuestra convivencia social se verán afectadas por un tiempo indefinido, o incluso “tal vez para siempre”.
En este sentido, el propio Consejero Presidente del INE, Lorenzo Córdova anticipó que sin duda habrá que trabajar en la implementación de medidas que brinden un “blindaje sanitario” a las elecciones. Un ejemplo sería el uso de tinta indeleble en spray, o la implementación del voto electrónico entre otras medidas para evitar el contacto físico entre las personas que acuden a las casillas electorales. Y aunque dijo que hasta el momento no se considera que exista riesgo de que la elección sea suspendida, aunque en un escenario extremo, sí podría considerarse su aplazamiento.
Sin embargo, habría que considerar también complicaciones en dos escenarios fundamentales para el desarrollo del proceso y la jornada electoral.
El primer escenario es el de carácter organizativo. Partidos políticos e instituciones electorales deben celebrar asambleas, sesiones públicas, foros. Mientras se mantengan las restricciones sobre los eventos masivos o grupales por motivo del llamado “distanciamiento social”, habrá que pensar en otros mecanismos de organización.
Y qué decir de las propias campañas. En México se antoja prácticamente imposible el desarrollo de una campaña electoral sin el consabido ceremonial de mítines, recorridos, salutaciones y “visitas casa por casa” con la respectiva parafernalia de apretones de manos, abrazos, besos y fotos de candidatos cargando bebés en sus brazos. Nada de eso podría tener efecto de prevalecer la contingencia sanitaria.
El segundo escenario es, sin duda, el económico. México es un país que hasta una enorme cantidad de dinero en partidos políticos, campañas y órganos electorales. Se prevé que para cuando inicie formalmente el proceso 2021, nuestro país comience a resentir de manera más severa los efectos económicos recesivos derivados de la pandemia.
La escasez de recursos pondrá bajo un severo cuestionamiento a todo gasto electoral por parte de la opinión pública. El otro reto será motivar la participación electoral: ¿cómo convencer a los ciudadanos de salir a las urnas después de un episodio tan complejo, que ha costado vidas y muchos más ha marginado de la posibilidad de obtener el diario sustento?
Esperemos un comportamiento ejemplar de parte de todos los actores políticos que habrán de involucrarse en el proceso. Porque de lo contrario, las elecciones del 2021 bien podrían ser recordadas bajo el oprobioso título de “Los Juegos del Hambre”.
Twitter: @miguelisidro
SOUNDTRACK PARA LA LECTURA:
-Molotov (México)
“Voto latino”
-Cecilia Toussaint (México)
“Bulldog blues”
_Eulalio González “Piporro” (México)
“El candidato”
Rodrigo Septién (España)
Elecciones… ¡otra vez!