
ANUAR JONGUITUD
En el transcurso de los meses hemos visto cómo ha estallado una guerra en el extremo oriental de Europa, justamente al norte del Mar Negro y del Mar de Azov: Ucrania. El presidente (de facto vitalicio) de Rusia, Vladimir Putin, ha invadido el oriente de Ucrania en su intento de ayudar a los bandos separatistas del Donbás. Incluso, un par de dÃas antes que Putin iniciara lo que él denomina su Operación militar especial, declaró de forma unilateral la independencia de las repúblicas populares de Luhansk y Donetsk (una violación flagrante de la diplomacia internacional, puesto que está declarando independencia en regiones externas a su territorio nacional). Pero, ¿desde hace cuánto se veÃa venir este conflicto? Haremos un recuento de todos los puntos previos al estallido del conflicto.
Número Uno: Cuando Putin era tan solo un novel agente de la KGB, este mismo escribió un ensayo de cómo es que la república de Rusia al igual que la república de Ucrania eran un mismo pueblo y que estaban destinados a estar juntos compartiendo una misma historia, una misma gente y unos mismos ideales. Como es sabido, la Rusia del dÃa de hoy ha cambiado de fronteras una y otra vez a lo largo de los siglos, cambiando territorio en incontables ocasiones con paÃses como Suecia, Finlandia, Ucrania, Polonia, e incluso otros paÃses menos pensados como Alemania e incluso Estados Unidos. Pero, la génesis de la Rusia actual tiene como punto de partida La Rus de Kiev, justamente en la capital de Ucrania.
Para Putin es importantÃsimo que toda la historia y cultura eslavas pertenecientes a esos antiguos estados que se han convertido en la Rusia actual se mantengan juntas. Ciudades como Kharkiv, Odessa, Mariupol, Kiev y Sebastopol son importantÃsimas para los objetivos del Kremlin, aunque posiblemente de todas ellas tan solo un par puedan ser un blanco a ser tomado objetivamente. Además, en ete mismo ensayo, dice categóricamente que la caÃda de la Unión Soviética ha sido el más grande desastre a nivel global de al menos el último siglo. Ergo, pretende recrear una URSS de forma moderna, con estados independientes sobre el papel, mas fácticamente subordinados a Moscú.
Numero Dos: Rusia llevaba al menos década y media aumentando su gasto militar. Sobretodo desde que se comenzaron a inflar los números de los ingresos petroleros del paÃs, de precios que a principios del milenio estaban apenas por allà de los veinte dólares, hasta los que quince años después estaban cerca de los ciento cuarenta dólares por barril. Eso ayudó a mejorar las ya muy gigantescas reservas bélicas del paÃs. Siempre que hay un gasto bélico grande, la industria militar, como un mercado como cualquier otro, no debe entrar en crisis: para esto es que vienen las guerras, para utilizar las municiones guardadas y reponerlas por nuevas.
Número Tres: Otros paÃses de la región, tales como China e India comenzaban a ser importantes potencias regionales, lo que presiona a Rusia, (más que Estados Unidos o la OTAN), a verse implacables en decisiones de geopolÃtica. Eso ha hecho que Rusia estreche lazos con estos paÃses (en los que ve a enemigos potenciales), e incluso motu proprio ha impulsado la agenda geopolÃtica-económica con estos paÃses, incluso en muchas veces sirviendo de mediador, pero sin dejar de mostrar su poder blando a través de la diplomacia.
Número Cuatro: Una vez aumentado su poderÃo militar, Rusia comenzó a incrementar su influencia geopolÃtica, sobretodo sobre lo que antes era la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas. Ahora, esta influencia no fue a través de poder blando, acuerdos económicos y diplomacia, sino a través de la fuerza: la demostración de poder a través de sus fuerzas armadas. Todos estos intentos fueron en paÃses pequeños, que seguÃan cerca de la influencia moscovita: tales casos son los ataques a Georgia, creando de forma virtual a las Repúblicas Independientes de Abjasia y de Osetia del Sur en 2008 (justo cuando se estaban dando los Juegos OlÃmpicos de Beijing). También existe reconocimiento desde 2006 de Transnistria, una región separatista de Moldova que tiene gobierno propio, fuerzas armadas, e incluso moneda independiente (aunque sus billetes y monedas sean de plástico y parezcan tan auténticas como las de Monopoly), solo que esta región aún no ha sido intervenida militarmente por Moscú, hasta ahora. Además de usar sus fuerzas armadas para calmar algunas regiones separatistas dentro de la misma Rusia, tal como lo vimos hace dos décadas en Chechenia.
Número Cinco: A partir de 2014 se inicia un plan para debilitar al estado ucraniano, donde Moscú comienza a auxiliar militarmente a los independentistas del Donbás. Los cuales de ha poco empiezan a tomar algunas zonas de la región industrial más potente de Ucrania. Casi de forma unÃsona, también se realiza la anexión de la penÃnsula de Crimea, tomando asà de forma unilateral todo este territorio que de iure es parte de Ucrania, pero de facto ha sido arrebatado por el Kremlin.Â
Número Seis: este quizá sea el punto más polémico: la enfermedad de Putin. Desde hace algunos meses y por varios medios de comunicación de alrededor del mundo, se ha especulado mucho sobre las posibles enfermedades que pudiera tener Vladimi Putin, que van desde cáncer, Alzheimer, leucemia, además de otros achaques que pudiera o no tener. En varios videos y transmisiones se observa a un lÃder muy demacrado y deteriorado. En el Desfile de la Victoria del 9 de mayo, incluso se le observa con una manta sobre el regazo, siendo un dÃa que particularmente no hizo frÃo. En las reuniones con otros altos funcionarios del gobierno ruso, se mira tomando los bordes de la mesa con una mano de forma peculiar y poco común. Además de sus excesivos movimientos de pies que rayan en lo enfermizo.
Por otro lado, independientemente de las precauciones que el Covid-19, le han hecho tomar a todos los miembros del Kremlin, incluido el mismo presidente de la Federación Rusa, es recurrente que en sus reuniones diplomáticas con otros lÃderes europeos en su ya habitual mesa blanca, que las presidia desde el otro lado de la misma. Lo cual es ridÃculo, a menos que tenga cierta fobia a contagiarse de algún patógeno extraño y poco benigno, lo que complicarÃa incluso más sus malestares. También existen otras teorÃas como que Putin está en cama u hospitalizado y quien sale en sus eventos protocolarios es un doble. Otra de ellas es que ya ha muerto, y el Kremlin ha puesto un doble para no bajar la moral de las tropas, ni exista un intento de revuelta por parte de los civiles que forman la resistencia.
Número Siete: Putin el megalómano. Sin lugar a dudas es un megalómano que quiere quedar en la historia de Rusia y del mundo a como dé lugar. Quiere ser próximo Lenin o el próximo Stalin, no importa a cuál se parezca más. Quiere ser héroe o mártir antes de que se muera y convertirse en un dios vivo para las masas rusas. Todo el mundo ha creÃdo que la fecha para el término de la invasión serÃa el 9 de mayo, DÃa de la Victoria. Todo el mundo pensó que serÃa una victoria rápida por parte de los rusos, pero no fue asà desde el principio: ni los rusos podrÃan avanzar tan rápido, ni los ucranianos ni sus aliados lo permitirÃan. El lapso pretendido para la victoria será de diez meses, para que Putin realice su entrada triunfal y logre quedar en la historia para la posteridad: el 31 de diciembre de 2022, el primer centenario de la fundación de la URSS.