La selección nacional de futbol japonesa es reconocida como tal desde 1920, se afilió a la FIFA y fue separada de la misma durante dos décadas debido a la participación de Japón durante la Segunda Guerra Mundial.
Aceptada de nuevo en 1950, la selección de Japón regresó a las competencias internacionales hasta obtener uno de sus mejores resultados en la historia de su futbol durante los Juegos Olímpicos de México, en 1968, al ganar la medalla de bronce. 30 años después, el equipo nipón clasificó a un mundial por primera vez para la Copa del Mundo de Francia ’98. Torneo en el que perdió todos sus partidos (Argentina, Croacia y Jamaica).
Desde entonces, Japón no ha faltado a un mundial y es la cuarta ocasión que se clasifica entre las 16 mejores selecciones del torneo. Es el mejor equipo asiático en el ranking de FIFA además de tener cuatro títulos como campeón de la copa asiática y un subcampeonato.
La Copa Asiática fue ganada por primera vez por Australia en 2015, cuando fueron locales, torneo en el que vencieron en la final a Corea del Sur; el tercer lugar fue para los Emiratos Árabes Unidos y el cuarto para Irak. Ese torneo se realizó fuera de Asía por primera ocasión y se celebró en Oceanía, por lo que 15 de los 16 participantes viajaron de continente a continente para participar y jugar en cinco sedes: Brisbane, Newcastle, Sídney, Melbourne y la capital Canberra.
Una década antes, la Federación Australiana de Futbol solicitó formalmente cambiar de confederación. El 17 de abril de 2005, el Comité Ejecutivo de la Confederación de Futbol de Oceanía aceptó que Australia saliera, lo que FIFA ratificó un par de meses después. Australia se integró a la Federación Asiática de Futbol el 1 de enero de 2006.
La razón por la que Australia quiso cambiarse de continente (en el terreno futbolístico) fue por necesidad de competencia, acostumbrados a ganar por decenas de goles de diferencia a sus rivales de zona, como su triunfo por 31-0 ante Samoa Americana el 11 de abril de 2001.
En Asia encontraron en muy poco tiempo lo que buscaban, cuatro años antes de ganar la copa continental habían sido subcampeones, ahora se miden por un lugar en el mundial ante selecciones como Arabia Saudita, Irán, Corea del Sur y por supuesto el mismo Japón. Ya no han faltado a la Copa del Mundo desde 2010 y ahora, en 2022, están en los octavos de final.
Australia eliminó a un campeón de Europa como Dinamarca mientras que Japón echó a la siempre triunfadora Alemania, con victorias directas. Su crecimiento es evidente y sostenido.
Por decisiones como la australiana es que Asia ya compite con Europa y Sudamérica por los mejores puestos en el mundial. Es cierto que cuando la pelota rueda todo puede pasar y cualquiera tiene la posibilidad de ganar, el futbol a veces otorga hermosas sorpresas. Pero también es cierto que llegan días en que las sorpresas dejan de serlo.